Pasé una blanca noche, a causa la luna llena, según Jeanne ;)
Afortunadamente, después de algunos rodeos, desayuné un zumo de naranja y una especialidad : sobaos.
Luego todo el mundo se abalanzó sobre los baños para darse un aspecto saludable.
Comenzó también las misiones de los profes : entonces con Agathe fuimos a hablar con los camareros del
restaurante para saber el precio de un café, una especialidad de la región (cocido montañés), la capital de Cantabria (Santander).
Luego, siempre con Agathe, intentamos ver una película, pero nos interrumpieron las diferentes canciones que cantaban
los alumnos y los profesores. Algunos mostraron verdaderos talentos ! Escuchamos varios repertorios desde « happy day » hasta « las gruesas tetas » !
Después de haber disfrutado de varias actuaciones musicales, descubrimos paisajes suntuosos, pero acompañado de muchas curvas.

Porfin, llegamos al mediodía al pueblo de La Vegua donde se sitúa el albergue, pero nuestra labor no se acabó !
En efecto tuvimos que llevar nuestras maletas hasta el albergue que, en mi opinión, se situaba muy muy lejos.
En ese momento me di cuenta que había llevado demasiado cosas !
Descubrí que el albergue que era muy bonito : tenía un patio !
Luego, subí mis maletas hasta mi habitación, pero había un problema : el cuarto era demasiado pequeño para ocho
chicas. Entonces, cambiamos de cuarto y encontramos un cuarto más grande, con baños y sobre todo con un espejo gigantesco !
A las dos de la tarde, estábamos en España, comimos en el comedor del albergue. El almuerzo constaba de lentejas de primero, y luego había croquetas, patatas fritas y un yogur.

Después nos encontramos con dos guías que se llaman Raul y Jorge. Explicaron el programa de la semana y las reglas del albergue.
Luego, hicimos un paseo a través de los campos de vacas, hasta un puente de piedra.
Durante el fin de la tarde nos dividimos en dos grupos para hacer actividades.
Comencé por el tiro con arco, fue muy divertido. Con Agathe fue como una revelación ! Sin bromear éramos bastante fuertes. Pero después cuando era el momento de jugar al juego de la rana fue un desastre ! Y eso se repitió con el juego de los bolos en la filatelia. Sin embargo me gusto esta tarde que fue tranquilla después de un viaje de 14 horas.
Chiflé también con mi ducha aunque estuviera fría.
A las ocho y media la campana sonó para la cena, sonaba cada vez que debíamos reunirnos.
Comimos patatas fritas, puré de patatas y un escalope a la Milanesa.
Después, me acosté de buen grado , cruzando los dedos para no caerme de mi cama que era alta y estrecha!